Langostín que me miras desde tu Mediterráneo portátil, este blog no se actualiza todo lo que quisiéramos, lo sé, pero es que nos falta el tiempo por todas partes desde que te has venido a vivir con nosotros. ¿A ti te pasa igual? Diría que sí, a juzgar por tu actividad incansable.
Hoy aprovecho que es el Día del Padre para hacer un poco de balance y, de paso, despejar algunas dudas.
Por ejemplo, ¿a qué te saben los puños que, desde hace unas semanas, te chupas con tanta fruición como estruendo? ¿Están ricos? Pues ya verás los pies, ya verás.
Tras superar la marca de los 6 kilos con poco más de dos meses, ¿crees que tardarás mucho en romper la barrera de los 7? (Es evidente que te estás preparando concienzudamente para ello, y si no, que se lo pregunten a La-que-te-metió-en-todo-esto)
Te encanta salir de paseo, ¿es por el aire libre, el sol y los pajaritos, o más bien por ver cómo voy atropellando a las viejas sin querer, o para que la gente se pare y te diga cosas bonitas?
Esto de sonreir y hacer mucho "agooo" y otros sonidillos, ¿te sale espontáneo, o estás interpretando? Y, ¿qué quieres decir exactamente con eso de "agooo"? ¿Estás pidiendo bocatita de chorizo? (Es una interpretación de las muchas posibles)
Y cuando lloras desconsoladamente, ¿es porque te duele España, como a Unamuno, o es más bien sólo por la tripita, como a Winnie the Pooh? ¿O es que te van a salir los dientes? ¿O te hacen daño los oídos? ¿La cabeza? ¿O es por los rumores de que se va a suprimir el cheque-bebé? (no sigo, que me dan ganas de llorar hasta a mí).
¿Te gusta tu cuna nueva? ¿Cuánto vas a tardar en no caber más en ella, como ha pasado con la anterior, que ya se ha quedado para las ratillas húerfanas que aún usan chupete?
"Calculo que en un par de meses habrá reordenación de espacios: yo a la cuna grande, el langostín a la cama de sus padres, y los padres al sofá del salón"
Esto de portarse tan bien con los extraños y reservar los momentos bajos, mohínos, quejosos, mocosos y cansinos para cuando nos quedamos solos contigo, ¿tú sabes si lo hemos hecho todos, o es una aportación tuya personal a la extensión de los límites de la pacienciología humana?
¿Qué te han parecido las vacunas de los dos meses? Molan, ¿eh?
Y por último, ¿por qué eres tan curioso? ¿Tú sabes si es más bien genético, más bien cultural, o más bien es porque te da la gana?
No hay comentarios:
Publicar un comentario