domingo, 26 de abril de 2009

Encapuchado


No os creáis que es fácil sacarle fotos al langostín con todo lo que se mueve. Las que logramos subir al blog son producto de una rara combinación de suerte, reflejos y despiste o condescendencia por parte del sujeto. Detrás queda todo un Archivo Fotográfico de la Borrosidad y Fondo Documental para el Estudio de la Impericia Parental.

Por cierto, repasando veo que hay una cierta tendencia a la capucha en este niño, lo cual no sé si prefigura una inclinación a la estética hoodie o más bien a la trapense. La verdad es que entre uno y otro extremo se abre un amplio campo de inciertos futuribles, terreno propicio para el vacile y las ganas de fiesta, en el que el langostín se mueve como pez en el agua.

Y tanto que se mueve.

1 comentario:

Unknown dijo...

será difícil pillarle de pose, pero cuando sale bien ¡¡¡¡qué bien sale!!!!

está superprecioso en esta foto

besos a los tres

tía raspa quasimexica